He leído estos días El segundo testamento (Lewis Warren, Wildcat Editorial, Barcelona 2024), segundo volumen de la saga de Mike Fontana. No es propiamente un bolsilibro, ya que su tamaño es algo mayor y también cuenta con más de 130 páginas. Sin embargo, por su estilo y presentación, lo he leído como si lo fuera. La edición de la serie me ha encantado, con excelente portada, varias ilustraciones interiores, un texto final de opinión, lámina de personajes… Un producto muy agradable sin duda.
Mike Fontana, personaje clásico
El personaje se presenta con un estilo como de clásico de la novela negra estadounidense de los años 50, y en efecto la novela tiene ese tipo de ambientación. Pero a la vez, la historia tiene elementos de novela policiaca de corte más tradicional. Para empezar, un misterio complejo, intrincado, con entrecruzadas relaciones familiares en torno a una herencia. Existe cierta violencia, pero ella no es herramienta para el avance de la trama, sino que son más esenciales las conversaciones de unos con otros, tanto con participación del detective como espiadas por él.
Llama también la atención la seriedad de Mike Fontana, el protagonista, su carácter muy sensato, de pensar bien las cosas y darles muchas vueltas, su actitud de ayudar y hacer justicia. No es nada travieso o mujeriego, no está en la línea del hard boiled de la «serie negra golfa‘. La narración es muy detallada, mesurada y con completas explicaciones finales.
El estilo tiene buen nivel, la historia avanza con mano firme y la prosa resulta agradable, pulcra, con gran detalle en las acciones y personajes. En resumen un policiaco muy agradable, con sólido personaje y seriedad narrativa.